La miel, ingrediente elemental en remedios caseros

miel de caña

El papel de las abejas en el ecosistema es crucial, después de todos, son las responsables de polinizar al menos el 50% de las plantas; pero hay algo más que caracteriza a estos maravillosos insectos: la elaboración de la miel, alimento de idolatría mundial no solo para endulzar el paladar, sino como ingrediente en numerosos remedios naturales y tratamientos de belleza.

Principales usos de la miel:

El contenido vitamínico, mineral y antioxidante de este elixir milenariamente utilizado – junto a sus propiedades antibacterianas y desinflamantes – le hace participe en cualquier clase de remedios caseros. 

  • Cicatrizante de heridas: bastará con untar el área a tratar – previamente desinfectada – cuidando de dejar un espacio para que la piel respire; acto seguido, cubrir con un apósito hidropolimérico que absorba el líquido expulsado por la herida. Repetir a diario hasta cicatrizar. 
  • Aliada en el cuidado del cabello: combinando miel con aceite de almendras y plátano, se obtiene una excelente mascarilla capilar que suavizará el cabello mientras cierra las puntas abiertas. 
  • Desintoxicante natural del organismo: su contenido antioxidante y enzimas activas, son perfectas para desintoxicar el cuerpo; efectividad que se incrementa, fusionando una cucharada del ingrediente a un vaso de jugo de piña, para tomar en ayunas 2 veces a la semanas.
  • Restauradora de la piel facial: la pasta obtenida de mezclar 3 cucharadas de miel con un par de canela en polvo es la mascarilla ideal para devolverle la salud lozanía al rostro. 
  • Para aliviar la tos: la infusión de miel, jugo de limón y aceite de coco calma la tos en cuestión de minutos; basta con combinar en una taza de agua caliente, dos cucharaditas de cada ingrediente y tomar tibio dos veces al día.
  • Hidratante de las manos: la acción regeneradora e hidratadora de la miel, es idónea para devolverle la suavidad a las manos, propiedad que se maximiza si se mezcla con un poco de aceite de almendras.
  • Recuperadora de los músculos: tomar una cucharada de miel después del entrenamiento, es suficiente para reponer energía y evitar la atrofia muscular derivada de la pérdida de glucosa propia de rutinas exigente.
  • En la lucha contra problemas digestivos: sea que se combine con menta o jengibre, la infusión de miel supone una aliada para sentirse más ligero tras la ingesta de comidas pesadas; en cuadros agudos, conviene tomarle en ayuno debido a su poder antiinflamatorio.   

Imagen via tiendatrops.com