La caries es una enfermedad producida por muchos factores, siendo el más relevante de ellos la higiene bucal. Por ello, un correcto cepillado con un dentífrico sin flúor o con poca cantidad de este compuesto, puede ser lo ideal si el resto de causas que originan la caries – como el azúcar o la genética familiar, por ejemplo – están bajo control y si no existe un riesgo demasiado pronunciado de padecerla.
Cuando el riesgo de padecer caries es más elevado, en ese momento se necesita un dentífrico de por lo menos 1000 partes por millón (ppm) del flúor, incluso aunque se trate de un niño muy pequeño. De todas formas, siempre es recomendable acudir al odontopediatra para que sea quien defina de forma más exacta la cantidad recomendada. Acudir al mencionado experto no debe ser algo que los padres deban descuidar; se recomienda la primera visita incluso desde que aparece el primer diente para así ir descartando riesgos de caries y obtener mayores consejos sobre prevención en complicaciones de la salud dental del infante.
¿Qué cantidad de pasta de dientes se recomienda utilizar?
En niños de 0 a 2 años de edad, si se tratan de pacientes con riesgo bajo de caries y, sobre todo, hasta que no aprendan a escupir, no es necesario recurrir al uso de la pasta dental. Si el riesgo de caries es mayor, utilizar una cantidad muy limitada de dentífrico con 1000 ppm es suficiente.
Es a partir de los 2 años de edad cuando todos los niños deben empezar su disciplina de higiene dental. Las cremas de dientes fluorada de entre 1000 y 1450 ppm, en mínimas cantidades y por lo menos 2 veces al día después de cada comida.
¿Hasta cuándo es necesaria la supervisión de los padres?
Se recomienda que sean los propios padres los cuales se ocupen de cepillar a los hijos hasta los 3 años. A partir de ese momento, el cepillado debe ser supervisado por ellos. Se recomienda estar siempre al tanto de este aseo hasta los 8 años como mínimo, que es cuando ya se puede dar independencia a los niños para su propia higiene bucal.
Conclusiones
Para que los niños tengan una salud bucal óptima, en definitiva, es necesario seguir las siguientes pautas:
- Acudir al dentista durante el primer año de vida (de preferencia un especialista odontopediatra) para valorar el riesgo de caries y recibir las instrucciones adecuadas para la higiene oral.
- Si el riesgo de caries no es elevado, es muy importante la no utilización de pasta dental hasta los dos años de edad (o hasta que el niño aprende a escupir, para ser más exactos).
- Si el riesgo de caries es medio o alto, por el contrario, se recomienda la utilización del dentífrico con al menos 1000 ppm de flúor, muy poca cantidad y durante dos veces al día, tras las comidas.
- El padre debe cepillar los dientes del niño hasta los 3 años y posteriormente supervisado hasta los 8 años de edad, como mínimo.
Foto de http://www.clinicadentalxabierbeizama.com/instalaciones/